El alza de incidentes ecológicos y humanitarios en Puerto Rico, que perjudican al pueblo directamente, han aumentado descomunalmente en los pasados años.
Por: Alan Acevedo Negrón
El delito ambiental es la parte que más ha impulsado el alza de las voces del pueblo. Una parte de los servidores públicos del país no le brindan la importancia “correspondiente” a estas situaciones y por ello muchos compueblanos se han unido en la lucha incesante.
Tan reciente como hace dos años en el Condominio Sol y Playa en Rincón, comenzó la construcción de una piscina en el área marítimo terrestre; la cual viola la ley de Muelles y Puertos del 1968 que establece que la zona marítimo terrestre incluye los terrenos ganados al mar y los márgenes de los ríos hasta donde sean navegables o se hagan sensibles las mareas. También, especifica que en todo proyecto para la construcción de edificios, de segregación o de urbanización de terrenos, esos primeros 20 metros se dediquen a uso público. Además, en los 30 metros después de la servidumbre de salvamento, el reglamento establece una zona de separación en la que prohíbe la construcción de estructuras permanentes. A causa de eso, una tortuga carey pasó cuatro horas atrapada en dicha construcción.
El excandidato a la gobernación, Eliezer Molina, citó a sus partidarios y el pueblo para que fueran al condominio en Rincón, el 24 de julio de 2021. La manifestación surge con el propósito de que se le diera una orden de cese y desista a dicha obra. Sin embargo, esto no ocurrió. Aquí se puede ver el abuso de poder que se contiene en el sistema gubernamental. Los grandes mandos violan y pasan por encima de las leyes. Sin importar los efectos adversos que estas decisiones puedan tener.
Tanto fue así que varios protestantes entraron en un revuelo físico por la seguridad de esta playa. Luego de varios meses de una ardua batalla, consiguieron detener la construcción. El Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), emitió una orden de cese y desista. En el 2022 en Rincón, los manifestantes tomaron la iniciativa de derribar la verja y limpiar el área afectada. Es tan chocante ver cómo se tuvo que esperar varios meses para que la orden fuera aceptada y de igual manera observar el hecho de cómo los participantes limpiaron el área sin la presencia de los residentes del Condominio Sol y Playa ni el gobierno.
Otra catástrofe ecológica que sigue vigente hasta el día de hoy, es la del derrame de cenizas de carbón en los pueblos de Peñuelas y Humacao desde el 2015. La Junta de Calidad Ambiental (JCA) y la Agencia de Protección Ambiental en Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) aprobaron el desecho de las mismas, ya que según esas agencias estas no son tóxicas. No obstante, en muchos programas se han reportado los efectos secundarios de este “veneno”.
En un reportaje de Atlas de Justicia Ambiental (AJA) descubrieron que en Arroyo Barril, República Dominicana (RD), se depositaron 27,000 toneladas de cenizas de roca. La población a causa de estos depósitos comenzaron a presentar picos de abortos y problemas respiratorios. El Sistema de Energía Aplicada (AES) fue demandado por el gobierno de RD y pagó $6,000,000 para resolver la demanda. Actualmente, AES no exporta los desechos en RD, pero sí en Puerto Rico. Las acciones que estas corporaciones cometen afectan directamente a la salud de los perjudicados.
Los estudiantes de bioestadística de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Ciencias Médicas, hicieron un estudio que comparaba a las personas que vivían en lugares donde hay exposición a cenizas de carbón y personas que no estaban expuestas a estas cenizas para ver la diferencia de prevalencia de enfermedades. Los lugares con estos residuos de carbón tienen altas tasas de enfermedad en comparación con los lugares donde no había cenizas, según el escrito «Depósitos de cenizas en Puerto Rico” del AJA. Cada una de estas investigaciones se les presentan a los departamentos correspondientes y ni así los aceptan.
De acuerdo con AJA, se han hecho otros estudios para ver los efectos de estos desechos de carbón generados por la quema en las plantas de generación eléctrica, llamándolos principalmente tóxicos, pero la EPA y JCA no han reconocido estos estudios, por lo que estas entidades también las consideran no tóxicas. La Cámara de Representantes de Puerto Rico ha emitido una resolución para el uso y la gestión de las cenizas de carbono que produce AES, ordenando a la JCA para estudiar la toxicidad de las cenizas y utilizar los resultados para crear y aplicar nuevos estándares. Estas compañías muestran sus verdaderos rostros a la humanidad, importándole más sus ganancias que el bienestar de muchos.
Observamos que en el pueblo retumba un grito de guerra ante el abuso masivo y fraudulento de muchas compañías millonarias que carecen de sensibilidad y de humanidad. Todo ser humano debe ser solidario con su prójimo y con aquel que refleje sus mismos ideales y valores. Esto da un margen para la socialización y las diversas maneras en que nos relacionamos. De esta manera hacemos uso del conocimiento y experiencia de muchos personajes anteriores que han dejado huella para que muchos se unan por la lucha del ambiente.